Breve
Historia del Caballo Appaloosa
La historia del appaloosa se remonta a épocas muy lejanas.
Existen representaciones de caballos con la capa típica de
los appaloosa en cuevas europeas, africanas y asiáticas,
con una antigüedad de miles de años.
La raza moderna nace sin duda en los
Estados Unidos gracias a los indios nez-percés. Los antepasados
de este caballo fueron también los ejemplares importados
por los españoles a partir de 1519.
Los nez-percés vivían
en la zona del río Paloosa, una región árida
y desértica al oeste del estado de Idaho, que aún
ahora es salvaje y primitiva.
Del nombre de este río deriva el de esta raza, que los
indios criaron y adiestraron con gran valentía a partir
del siglo XVIII.
A pesar de la habilidad y fuerza de
hombre y caballos, los nez-percés fueron vencidos por los
invasores blancos, al igual que las restantes tribus de pieles
rojas.
Apartir de 1920 se intentó criar
los appaloosa con criterios nuevos, cruzándolos con caballos
árabes. Un hombre llamado Claude Thompson inició
en un rancho de su propiedad la difícil batalla por evitar
la extinción de esta raza. En 1938, y con la ayuda de otros
defensores de este caballo, se inauguró un club del appaloosa;
el club contaba con la presencia de cuarenta y cinco socios y
ciento trece caballos.
El crecimiento fue lento, pero gradual,
y en la época posterior a la guerra, gracias al doctor
Francis Haines, este caballo fue conocido y admirado en todo el
mundo. En la actualidad existen unos doscientos mil ejemplares.
Carácter
Dócil, veloz, dúctil y
muy resistente.
Aspecto exterior
El appaloosa es un caballo cuya característica
principal es la capa y según ésta existen seis tipos
fundamentales: appaloosa leopardo, que presenta unas manchas ovaladas
en toda la capa, con un fondo blanco o de color claro; appaloosa
de lomo manchado (una raza antigua, tal vez la original), con
la grupa y los riñones de color claro, con manchas oscuras
sobre fondo, oscuro; appaloosa de lomo claro y crines oscuras,
con grupa y riñones claros sobre un fondo oscuro;
appaloosa copo de nieve, con base oscura
y manchas blancas en todo el cuerpo;
appaloosa a gota, con manchas oscuras sobre un fondo blanco en
todo el cuerpo;
y appaloosa jaspeado, con una parte anterior oscura con manchas
blancas y de otros colores, y una parte posterior clara con manchas
oscuras.
Por lo general, los machos tienen manchas y colores más
definidos que las hembras.La cabeza, recta y noble, puede ser
algo acarnerada. El cuello es de longitud media y bien asentado;
los hombros son inclinados y la cruz, poco acentuada. La grupa
es musculosa y redondeada, muy robusta; las extremidades son delgadas
y huesudas, pero muy resistentes; el casco muy duro. La cola y
las crines son poco espesas.
Aptitudes
Como ya se ha dicho, el appaloosa es
un caballo muy rápido, resistente y dócil, lo que
favorece su adiestramiento y lo convierte en un estupendo caballo
para paseos por el campo.
Fue caballo de los indios después del quarter y juntamente
con el pinto; los nez-percés, una de las tribus más
poderosas, luchaban y cazaban con los appaloosa.
El appaloosa no ha sido aún utilizado como caballo de competición,
sus únicas apariciones se limitan a los rodeos, en donde
su capa añade interés al espectáculo.